En un entorno donde la tracción se ve impactada por la presencia de hielo o nieve en las carreteras, es crucial estar preparado para enfrentar estas difíciles condiciones climáticas. A continuación, te presentamos consejos prácticos para poder manejar de manera segura.
Recomendaciones esenciales para una conducción segura en invierno
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Aumentar la distancia de seguridad: en superficies mojadas, la adherencia disminuye, lo que resulta en un aumento en la distancia de frenado. En presencia de hielo, un vehículo podría necesitar hasta 10 veces más espacio para detenerse de forma segura.
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Reducir la velocidad: la falta de agarre puede hacer que un automóvil se deslice incluso a 20 km/h en una curva con hielo.
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Ejecutar maniobras de forma suave: tanto al frenar como al girar el volante, es crucial que los movimientos sean progresivos y suaves para evitar situaciones de peligro.
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En caso de nieve acumulada, se recomienda circular por las huellas dejadas por otros vehículos y hacerlo a una velocidad reducida para mantener el control.
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Si se utilizan cadenas, no se deben superar los 50 km/h y se deben evitar terrenos sin presencia de nieve o hielo.
Medidas para la conducción en condiciones de hielo o nieve
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Al circular sobre hielo, es crucial llevar a cabo una conducción suave y delicada para conservar el control del vehículo.
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Ante nevadas, es importante encender las luces adecuadas y evitar el uso incorrecto de las luces antiniebla traseras para prevenir deslumbramientos.
Consejos para enfrentar el invierno y las bajas temperaturas
Además de tener precaución al conducir en condiciones de hielo o nieve, es fundamental equipar adecuadamente tu vehículo para enfrentar el invierno con total seguridad. Consulta los recursos disponibles para obtener información práctica sobre cómo prepararte para las bajas temperaturas.
